Foto: AS México |
En el segundo partido de México, en la CONCACAF
Nations League, donde recibió la visita de la Selección de Panamá,
no se tuvo que implementar el protocolo de la FIFA en contra del grito
homofóbico, que se realiza cuando el portero visitante despeja, debido a
que la mayor parte de la afición que acudió al Estadio Azteca siguió las
reglas.
Tras el partido, se reportó que únicamente fueron 30
personas las que fueron expulsadas del estadio, debido a que realizaron el
grito de “puto”, y, a pesar de que se les advirtió, continuaron gritando,
por lo que tuvieron que salir del recinto.
Debido a que el grito casi no se escuchó entre la afición, no
se tuvo que realizar el protocolo correspondiente, el cual consiste en realizar
un primer aviso a través de las pantallas del estadio, para que los
aficionados dejen de realizar este grito.
Si esto continúa, el árbitro podrá parar el encuentro
unos minutos y los jugadores entrarán a los vestidores; cuando se vuelva a
reanudar el partido, si se escucha una vez más el grito, el silbante podrá
dar por terminado el partido, y el equipo local (en este caso, México) sería
declarado como perdedor.
Con sólo este incidente de las 30 personas que fueron expulsadas,
el partido entre México y Panamá se desarrolló sin ningún inconveniente,
y la Selección Azteca terminó ganando con un marcador de 3-1, con goles
de Roberto Alvarado, Rodolfo Pizarro y José Juan Macías.
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